Volar como una mariposa

Quieres cambiar para mejorar tu o llevas tiempo que no estas bien con lo que sientes, reactivo en tus contestaciones, no te sientes a gusto con tus emociones, cambiar las versiones que dices a las personas de tus alrededores.

Se que no es fácil, que muchos dicen que da vértigo o miedo mirar hacia adentro, no diré que no tengas razón, pero siempre que esta sensación de cambio crea adicción de cambiar y cambiar, hoy descanso, mañana sigo para gestionar esto que hoy no me ha gustado, ahora no me voy a desanimar, tirar por la borda lo conseguido no es caminar.

Es un camino largo comparado quizás con el de la mariposa, cuando empieza su andadura es dura tiene que luchar por si misma no puede tener ayuda, para empezar desde que no es más que un ser vivo hasta que al final es hermosa y vuela por ella misma armoniosa, con ese color especial que desprende su vuelo y la miras diciendo: qué cosa preciosa.

Nos pasa lo mismo, da respeto o miedo o vértigo pero debes empezar, comenzar y no desesperar, además piensa que tu tendrás acompañamiento de una persona cercana o el viento llevándote en volandas hasta llevar a cabo el mirar hacía adentro.

Cuándo no sientas ganas de seguir y te venga un lamento, piensa en la mariposa que por muy difícil que le es llegar a ser hermosa, no cesa en su intento hasta llegar a volar,  siente su fuerza,en tu hombro se posa.

Siente tus miedos hazte amigos de ellos y descubre lo bueno que llevas dentro, entonces y solo entonces sentirás en tu interior eso que todos tenemos cuando una situación o alguien nos ilusiona,las mariposas.

¡VUELA!

Heridas emocionales

A menudo "cargamos" con emociones que no hemos solucionado, con heridas que nos han causado ciertas situaciones o momentos que por la gravedad para nosotros de esta no hemos querido prestar atención en el momento, dejando de mirar en ese sentido, pero ha dejado cierto poso que esta ahí. Que de vez en cuando nos viene bien porque se repite una situación similar o porque a otra persona le pasa lo mismo y esto nos conecta con nosotros.

Estas heridas que en un momento determinado nos marcaron no tienen que acompañarnos toda la vida si nosotros no queremos, si afrontamos desde la gestión de esa emoción o del momento o de las dos cosas podemos curarla.

Podemos sanarla del todo, tapar con un vendaje ya que hemos hecho la gestión completa o bien una primera cura rápida pero seguir curando y curando hasta que cicatrice, de nosotros depende que queremos hacer.

No debemos tener prisa por sanar rápidamente algo que nos ha causado dolor, debemos ponerle el foco que es necesario para poder superarlo pero siempre desde si estamos preparados para asumir lo que se derive de la gestión emocional ya que no siempre depende de nosotros o nos repercute solo a nosotros. Hay muchas veces que debemos contar con otras personas o que los cambios que hagamos repercuten "a nuestro sistema", ya sea amigos, familia, trabajo, relación de pareja...

Entonces, que las situaciones que nos tocan, afectan, nos hacen plantearnos cosas hay que mirarlas esto es obvio, ¿Cuando?,  cuando seamos capaces de afrontarlas plenamente, estemos al 100% de energía y sintamos que es el momento. De todos modos normalmente no se suele dar la situación idónea para
solventarlo si tu no estas preparado, como dice el dicho "solo el maestro aparece cuando el alumno esta preparado".

Estas heridas emocionales la gran mayoría de las veces, por no decir todas, son creadas para que aprendamos de ellas. No dejes que tus heridas te transformen en alguien que no eres.

Podrías plantearte una serie de cosas:

-Mira que tienes pendiente en "tu mochila" por gestionar.
-Habla contigo,medita sobre lo que has hecho,crees que no ha sido correcto y no te deja avanzar.
-Deja de mirar hacía otro lado como si no fuera contigo.
-Haz por estar en calma contigo.
-Plantéate porque se te repiten las cosas.
-Mira las señales que te va enviando el universo para que sanes cosas.
-Deja que tu corazón hable por ti y parar tu mente.
-Ilusiónate
-Respira profundamente la vida.
-Cree en tus posibilidades pensando que nada es imPOSIBLE

En definitiva, disfruta de la vida que tienes, gestiona lo que tengas pendiente, pero sobre todo, NO DEJES DE PENSAR que el mundo SIN TI no sería igual, CRÉETELO, eres muy importante para muchas personas como para no SONREÍR..

¡ACTÚA!

Seguramente tendremos algún amigo o amiga que nos dice que esta perdida, que no sabe que es lo que va a hacer, hacía donde tiene que ir, por donde empezar, no sabe con que cuenta para avanzar...reaccionamos diciéndole lo mucho que vale, que tiene todas las actitudes y aptitudes para hacer, que mire su curriculum, sus habilidades, sus competencias...

¿Realmente esto es lo que esta persona o personas necesitan?

Lo que hay que hacer es que reflexionen sobre lo que les ocurre.

Primordial, unas preguntas para empezar, ¿Qué es lo que quieres hacer? y ¿cual es tu objetivo?. Si no lo tenemos claro del todo, no pasa nada, demos la vuelta a las preguntas, ¿Qué es lo que no te gustaría hacer? y ¿Cual no es tu objetivo?, normalmente actuamos o reflexionamos mejor desde la parte negativa que positiva, nos cuenta menos hablar en negativo que en positivo.

A partir de aquí, sigamos.

Que empiece por DONDE ESTAS actualmente. Desde donde esta partiendo para llegar al objetivo que desea conseguir. Desde cero, desde una formación u otra, un trabajo u otro, habilidades, competencias...En menor o mayor medida no se parte de cero puesto que todas las personas tienen habilidades innatas y
competencias desarrolladas.

Lo siguiente, es USAR LO QUE TIENES. Tener en cuenta todas las herramientas que tenemos formativas, experiencia profesional y personal, herramientas personales que hemos ido desarrollando con las distintas experiencias vividas, hobbies.

Con todo esto, HAZ TODO LO QUE PUEDAS. Recapitulando los dos puntos anteriores (donde estas y usar lo que tienes) dirígete a donde creas que debes enfocarte haciendo todo lo que este en tus manos para poder llegar a conseguirlo. Si pasa por estudiar antes de conseguir tu trabajo, hazlo, si pasa por trabajar
primero en un puesto inferior para conseguir experiencia hasta lograr lo que realmente te llena al 100%, hazlo, si pasa por tener unos meses sabáticos para coger fuerzas y empezar a moverte, hazlo....pero todo esto nos lleva a la conclusión de...¡ACTÚA! ¡HAZ! ¡ACCIÓN!

Todos tenemos una situación que nos motiva, que nos hace movernos, que nos da chispa para hacer, que nos hace salir de la cama, que nos da ilusión, solo hay que encontrarla porque a veces estamos tan ciegos por el "no podre" que nos olvidamos del "cuantas cosas me quedan por hacer".

No te dejes influir por lo que te digan que debes hacer, por la parte mental que nos dice por inercia que hacer, por el agobio de no se que pasara con mi futuro...conéctate con tu esencia, con tu interior, con lo que realmente te hace vibrar, porque ahí es donde encontraras cual es tu dirección a seguir o tu
objetivo a conseguir.

¡ACTUA!, haz lo que te has marcado ¡HAZ!¡HAZ!¡HAZ! y si tienes baches por el camino, ¡SIGUE!¡SIGUE!¡SIGUE! hasta conseguirlo.

El juego (Rayuela)

Un día Juan de camino a casa yendo por los mismos sitios que siempre, le llamo la atención que en el suelo había pintado con tiza números de 1 al 9 y en la ultima casilla la palabra cel. Era un juego al cual de manera inocente jugaba de pequeño sin ningún tipo más de inquietud que mantener el equilibrio y coger la piedra.

Juan creía en las señales y si había pasado infinidad de ocasiones por ese mismo sitio,no se había parado porque no había llamado su atención hasta ahora y esta vez sí, debía ser por algún motivo.

La primera reacción como siempre era preguntarse...¿Para qué me he fijado en este juego? ¿Qué me quiere decir este juego? ¿Con que me conecta? ¿Qué esta ocurriendo en mi vida ahora que pueda relacionarlo con este juego?

Pensaba y pensaba pero no encontraba a priori una respuesta para todas y cada una de las preguntas.Realmente si sabía cual eran las respuestas pero...debía ponerle orden y...cuando las respuestas llegan demasiado hondo..."duelen".

Decidió buscar información sobre el juego.

El juego se llamaba Rayuela o trueque. Y según leyó, consiste:

El primer participante debe situase detrás del primer número, con la piedra en la mano, y lanzarla. El cuadrado en el que caiga se denomina "casa" y no se puede pisar.

Se comienza a recorrer el circuito saltando a la pata coja en los cuadrados, o con los dos pies si se trata de un cuadrado doble. El objetivo es pasar la piedra de cuadrado en cuadrado hasta llegar al 10 (en este caso cel) y volver a la casilla de salida dando la vuelta en este ultimo número.

Si el participante pierde el equilibrio o la piedra se sale del cuadrado, se pierde el turno y pasa al siguiente jugador.

Esto estaba bien para entender el juego pero no acababa de conectarle con lo que el necesitaba por lo que siguió buscando. Cual fue su sorpresa cuando leyendo otro documento encontró:

Que se cree que está basada en el libro La divina comedia de Dante Alighieri, obra en la cual el personaje, cuando sale del Purgatorio y quiere alcanzar el Paraíso, tiene que atravesar una serie de nueve mundos hasta lograrlo. El jugador actúa a modo de ficha. Debe saltar de casilla en casilla, a la pata coja, empujando la piedra que se suponía representaba su alma. Partía de la Tierra para conseguir el Cielo (Urano), vigilando no caerse en el pozo o en el Infierno (Plutón) durante su recorrido. En ningún caso la piedra debía pararse sobre una línea, ya que, de la Tierra al Cielo, no hay fronteras ni zonas de demarcación, ni separaciones, ni descanso.

Obviamente Juan no estaba en el purgatorio pero si le conecto con la situación en la cual estaba en ese momento. Era que tenía que ir avanzando poco a poco, guardando el equilibrio en lo que estaba haciendo para poder llegar a su objetivo. Es decir, cultivar la parte en la cual vas aprendiendo de manera académica
por decirlo de este modo (estudiar o realizar cursos), pero también debía cultivar la parte más espiritual que no es más que lo que es tu propio Yo (que sientes, que piensas, que haces).

La vida es como el juego de Rayuela, tiras una piedra (empiezas un proceso), guardas o pones equilibrio, vas yendo de un proceso a otro siguiendo guardando el equilibrio hasta que al final llegas a tu objetivo, el cel.

Guardemos un equilibrio entre lo que es trabajo y el placer, entre lo que es hacer cursos, cursos y la parte espiritual (nuestro YO), entre que es lo que quiero y que hago para tenerlo.

La Pulsera de las alas

Esta es la historia de una conexión de energías, de momentos vividos, caminos paralelos pero cercanos en cuanto a probar situaciones que llenan de aire el espíritu, de risas y sonrisas, de caminos encontrados, respeto por aprender de la persona que crees una maestra, de emoción por la valentía, de sincronicidades y señales, de charlas amigables y otras pendientes por tener, de compañeros de camino, de como los puzzles se unen. Al final de como las personas nos encontramos con otras por algún motivo que normalmente al principio no sabemos para que es, pero que siempre tiene un sentido.

La pulsera en sí, es como si hiciera rombos de colores marrones, otro beiges sobre fondo blanco o negro, al final del lazo que hace que se sujete en la muñeca de una persona tiene anclado mediante una argolla una piedrecita en la cual hay dibujadas dos alas.

Cuentan que un día tuvo su dueño no se sabe muy bien quien es, por azar, destino, causalidad dejó de estar asociada o en manos de esta persona y vago por la vida sin dueño aparente.

Un día una persona la vio, la tomo en sus manos ya que le pareció bella en esencia y bonita por las alas, se la guardo en el bolso que llevaba y siguió su camino ya que no estaba en el mejor momento de perder tiempo en buscarle otra ubicación.

Transcurrió el día en los cuales fue encontrando personas que le fueron ayudando en lo que necesitaba hasta llegar a su casa puesto que dicha pulsera fue un encuentro casual en su vuelta a su ciudad.

En un momento dado se dio cuenta que llevaba la pulsera en el bolso y le vino a la mente el nombre de José, entendió y sintió que no debía quedarsela sino ofrecersela a esta persona, creyendo que sería quien debería llevarla.

Una vez pudo hablar con esta persona, le explico con detalle como había sido el encuentro de la pulsera, como se había acordado de el y que quería si el aceptaba que la llevase. Al momento José tenía la pulsera en la muñeca dado que no solo la historia era bonita, con que energía e ilusión describía el momento, el motivo de las alas era muy bueno, el que se hubiera acordado de el muy bonito, SOBRETODO por la persona de la cual venía ya que había una MUY BUENA conexión.

Causalmente días más tarde de esto, esta misma persona, José, en conversación con un grupo de amigos hablaban de como las personas tenían alas "como los ángeles" para poder conseguir lo que quisieran, como si te dieran las alas diciéndote....ya estas listo para volar solo...

Sea por un motivo o por otro, muchas veces necesitamos de nuestra pareja, amigos, familia, o de todos de manera secuencial, que nos hagan ver lo que valemos y nos apoyen incondicionalmente en todo, nos muestren con hechos lo que podemos llegar a hacer, nos regalen una pulsera con alas, sepamos que siempre estarán ahí para darnos cuenta del POTENCIAL ESPECTACULAR que tenemos dentro y de lo poco que le prestamos atención viendo y alabando en otros lo que nosotros TAMBIÉN SOMOS CAPACES DE HACER.

Creamos más en nosotros porque ESTA EN NUESTRO INTERIOR EL SER NUESTRA MEJOR VERSIÓN para mostrarnos al mundo desde el amor sin pensar que nos van a hacer daño.

Gracias a todas las personas que sea con palabras, hechos o "regalos" nos acompañan a seguir dando pasos.