jueves, 7 de mayo de 2015

¡ Que corra la voz !



Seguro que hemos oído esta expresión de "Ver, oír y callar" y en muchos trabajos o relaciones las ponemos en practica ya que no nos queremos involucrar más de la cuenta o no queremos ir más allá de ese tipo de relación.

Es muy usada y que en muchas circunstancias es menos problemática que abrirte a contar lo que realmente te pasa por la cabeza o el corazón.

Considero que es mucho mejor el dialogo, el exponer, el poner sobre la mesa lo que te pasa con el entorno que te rodea. Y en innumerables ocasiones así lo hacemos hasta el punto de confiar en personas cosas muy intimas sintiéndonos seguros de estar a buen recaudo.

Es cierto que no todo el mundo actúa de la misma manera, hay otras personas que solamente te cuentan una parte de lo que les ocurre, otra se la guardan para ellos porque consideran que es muy personal, y no pasa nada.

Lo que si llama la atención son estas personas que te "incitan" a contar, se ganan tu confianza, te hacen participes de situaciones en las cuales ellos también están incluidos, van tirando el hilo para que vayas contando y contando, al final.... "Que corra la voz", cuentan la parte que creen oportuna tuya, evitando claro esta, decir que ellos han sido participes de los comentarios, que han opinado exactamente igual o algo más "agresivos" que tu. Podrían contar para ser pulcros en la narración que salió la conversación, que su opinión fue esta y la de al lado fue...esta otra, pero no evitar contar que ellos también estaban diciendo. Sería un..cuéntame lo que piensas que yo me quedaré con lo que me pueda interesar contar.

¿Para que actúan así? Cada uno lo hará por una cosa diferente a los otros, considero que  el común denominador es por ganarse la confianza de la persona para que le cuente y necesitar reconocimiento o ganar puntos o hacer méritos de la persona (una tercera persona) a la que le facilita dicha información.

Ser selectivos o detectar a quien si y a quien no también es cierto que debemos hacerlo...pero..realmente...¿nunca nos ha pasado que hemos depositado nuestra entera confianza en una persona durante años y al final todo se termina? La respuesta supongo que es un SI.

Por lo tanto, debemos sentirnos en la libertad de contar a las personas lo que creamos o queramos que quieran saber si pensar en que harán con esa información porque sino dejaríamos de hablar para comportarnos como robots.

Aprendamos de las relaciones con las personas y lo que ocurre cuando confiamos.Pensemos que todo el mundo no es de la misma forma, que las cosas ocurren por algún motivo y que aprender es una de las partes, muy importantes, que tenemos en nuestra vida.

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